Almería, en régimen policial

En el Ayuntamiento de Almería, presidido por el PP, se ha aprobado recientemente la nueva Ordenanza Municipal de "Convivencia", que consiste en la restricción de la libertad de actuación, movimiento e incluso agrupación de la ciudadanía. Algo parecido a lo que ocurrió en Sevilla cuando una ordenanza similar prohibía una reunión de más de tres personas en la calle y la Policía Local obligaba a la gente a "circular" por el "bien del orden público y la seguridad cívica", convirtiendo a la ciudad en un municipio policial a partir de ciertas horas del día.
Sí, sí, igualito que en una dictadura no tan lejana.

Esta nueva ordenanza en la capital almeriense va más allá, ya que la libertad política es restringida hasta el punto de la prohibición del reparto de cualquier tipo de propaganda política, cartelería o adhesivos con posicionamientos contrarios a los marcados estrictamente por el gobierno municipal bajo pena de multa y sanción para aquel que, en el uso de su libertad política, ejerza dichas acciones como medio de difusión.

Además de todo lo mencionado, también se ha restringido la llamada "cultura de la calle", prohibiendo actividades culturales como el break-dance, la artesanía, la actuación de mimos y malabaristas o la música, aclarando que ningún individuo podrá estar tocando más de media hora en un mismo lugar (y es que hoy en día todo eso son una panda de vándalos piojosos que dan mala imagen).

Más de las medidas que surgen en el seno de esta ordenanza son las llevadas contra las prostitutas (que no contra los proxenetas), viandantes, niños, jóvenes y vagabundos, sectores más vulnerables de cara a estas sanciones.

Y es que, se pinte como se pinte, parece que el fin de esta ordenanza, más que la seguridad y el orden público, es el recaudatorio, y si para preservar los intereses de la clase gobernante hay que implantar un régimen policial, pues se implanta.

La Trinchera del Infierno quiere mostrar su más completa y absoluta repulsa hacia este tipo de actuaciones por parte del Ayuntamiento de Almería y el equipo de gobierno que lo preside, porque la calle únicamente pertenece a los ciudadanos, no a ningún burócrata del poder fáctico.

¡LA CALLE ES LIBRE!